Las ganas de llorar constantes vuelan lejos cuando estamos juntos, vuelven al instante que te vas. Quiero mi felicidad eterna, con vos a mí lado, con vos durmiendo conmigo, abrazándome, besándome, riéndonos, jugando, quiero que seamos felices, quiero que me hagas feliz por siempre.
Nunca me faltes, sin vos perdería todo rastro de alegría, toda sonrisa formada en mí rostro morirá con tú partida.
Te ruego de rodillas que jamás me dejes.
Prometo hacer que tu felicidad sea eterna, voy a dar hasta mi vida si eso fuera necesario. Jamás te voy a dejar sola, jamás voy a permitir que eso pase :c
ResponderEliminar